Vistas espectaculares
Amabilidad del personal
Desayuno variado

Baño descuidado
Aire acondicionado ruidoso
Menú de restaurante limitado

Vistas impresionantes del Guadiana.

El Parador en Ayamonte tiene unas vistas espectaculares al Guadiana y el desayuno fue uno de los mejores que he probado en un Parador. La habitación era espaciosa, aunque su disposición podría mejorar para mayor comodidad. La atención en el restaurante fue muy amable, aunque un poco desorganizada.

la ubicación es increíble, tienes vistas al río y a portugal, el personal muy amable, el ambiente es super relax y tranquilo. la piscina es genial para desconectar, y el jardin está bien cuidado. además, el detalle del gatito suelto en el parador, me encantó, muestra que ahí cuidan a los animales. 😺

sin embargo, el aire acondicionado no funcionaba bien y había un olor raro en la habitación. además, el menú del restaurante no es muy variado y me decepcionó un poco.

Experiencia inolvidable con unas vistas maravillosas

Nos alojamos durante dos noches y disfrutamos de una habitación amplia con una terraza perfecta. Cenamos en el restaurante, donde probamos platos exquisitamente preparados y generosas raciones. Recomiendo visitar a primera hora para asegurar que el desayuno tenga variedad, ya que la reposición no fue adecuada.

Disfruta de un desayuno en la terraza para aprovechar al máximo las vistas al río. Es un momento mágico empezando el día.

tranquilidad y un gato amigable que nos acompañó

vistas espectaculares, piscina exterior

sorprendentemente lento servicio de cena

La ubicación es simplemente magnífica. las vistas al río son inigualables y el acceso a la piscina permite disfrutar del paisaje mientras te relajas. Además, se pueden alcanzar fácilmente el centro del pueblo y el terminal de ferry hacia Portugal en un agradable paseo de 20 minutos. he notado que las instalaciones están bien mantenidas, lo que contribuye a disfrutar de una experiencia placentera.

Sin embargo, a pesar de la belleza del lugar, la falta de modernización en algunas áreas es evidente.

el olor a cañería al final del día no fue agradable. pero las vistas al Guadiana son espectaculares. la habitación es amplia y cómoda. el personal del restaurante fue súper amable siempre

Pasé dos noches en una habitación superior. La terraza era perfecta para disfrutar del aire fresco. La piscina era un gran lugar para relajarse. Las cenas estaban bien preparadas y abundantes. Las vistas al río son realmente impresionantes. 🌅

Las impresionantes vistas al río y a la costa portuguesa desde el balcón son simplemente increíbles, lo que hace que cada desayuno sea una experiencia que vale la pena. Disfrutar de la media pensión aquí resulta positivo, especialmente después de un día explorando los hermosos alrededores. Además, la cercanía a la ruta hacia el Algarve es excelente para los que desean pasear por allí.

Sin embargo, hay detalles que deberían mejorar. El baño en la habitación tenía un agua un poco inclinado hacia la derecha, lo que puede resultar incómodo. noté moho en la bañera debido a un tornillo oxidado, lo que no es aceptable para un hotel de este tipo. Para rematar, los muebles estaban llenos de picotazos en la pintura, dándole un aspecto descuidado que no se corresponde con el precio que cobran.

Impecablemente mantenido y servicio amable con una cocina deliciosa y una vista increíble del puente sobre el Guadiana.

Las vistas del río Guadiana son impresionantes, especialmente desde mi balcón. Pasamos unos días disfrutando de la tranquilidad del entorno. La habitación era espaciosa, aunque la decoración se siente un poco anticuada y debería actualizarse. Noté que la limpieza podía ser mejor. la bañera tenía un aspecto un poco descuidado. La atención del personal en el restaurante fue excepcional. recibimos un servicio atento y amable durante todas las comidas. La cena fue muy buena, destacando los platos de bacalao y pulpo. Sin embargo, el horario del restaurante me pareció un poco temprano y faltó una mejor variedad en el desayuno, como tortitas. podría mejorarse la ventilación en la habitación, el aire acondicionado no funcionaba bien y había un olor extraño. A pesar de estas quejas, el ambiente del hotel y las vistas hacen que valga la pena la estancia.

volveré sin duda.

La habitación era amplia y cómoda, con aire acondicionado, televisión plana, y minibar. Tenía un balcón con vistas espectaculares. El desayuno era variado y el servicio en el restaurante fue amable. La piscina al aire libre y los masajes son geniales para relajarse. ¡Una experiencia completa!